Ya está aquí el verano y la preocupación por nuestro cuerpo se multiplica respecto a otras épocas del año. “Ponerse a dieta” parece ser la solución más eficaz para adelgazar y lucir tipazo en bikini pero… ¿Y si pudieras comer mejor, cuidar tu cuerpo y perder peso simplemente eliminando algún alimento de tu alimentación diaria?
El doctor Ata Pouramini nos da las claves para adelgazar sin dietas, solo eliminando una serie de alimentos de la dieta, que junto a una serie de consejos para comer mejor y para perder peso, conseguirás tu objetivo casi sin esfuerzo. Todo bajo una máxima: escucha siempre a tu cuerpo antes de poner algo en tu boca.
Soja
Casi toda la soja y sus derivados son genéticamente modificados, y no hay que olvidar que nuestro cuerpo no puede procesar y digerir la comida que está manipulada genéticamente. Además, la soja también tiene niveles altos de componentes similares a los estrógenos, que interfieren en nuestro balance hormonal.
Maíz
Se trata de otro alimento genéticamente modificado. Este grano se encuentra en casi toda la comida procesada, y se termina convirtiendo en azúcares que provocan enfermedades crónicas como la diabetes tipo II.
Gluten
Este alimento se encuentra en los granos, especialmente la harina. Es pegajoso y dificulta la digestión, especialmente en personas sensibles, como los celiacos. Además, su consumo incrementa la inflamación general del cuerpo debido a que posee elevados porcentajes de ácidos grasos Omega 6. La actriz Gwyneth Paltrow es una fiel seguidora de la dieta sin gluten, así como otras muchas celebrities que ya sienten los efectos positivos de eliminar este alimento.
Lácteos
No son alimentos naturales para nuestra dieta. Además, actualmente los procesos de pasteurización y homogeneización destruyen nutrientes como enzimas, vitaminas y proteínas. Por otra parte, en los productos lácteos se encuentran antibióticos que son dañinos para el cuerpo.
Azúcares y edulcorantes
Hay un dato que es muy significativo: consumimos más azúcar en un día que nuestros antepasados en un año. Cuanto más azúcar se consume, el cuerpo se hace más resistente a la insulina y hay más posibilidades de que aparezca una diabetes tipo II. Los edulcorantes artificiales son peligrosos, tóxicos y causan problemas graves para la salud.
Cacahuetes
No son nueces, vienen de la familia de las legumbres y crecen bajo tierra en un ambiente húmedo, y cogen muchos hongos al no estar protegidos por una capa dura como por ejemplo las almendras. Cada vez hay más personas que presentan reacciones alérgicas a los cacahuetes.
Consejos prácticos para adelgazar con salud
- 1. Céntrate en la comida fresca (el pan, la carne o la leche suelen bloquear mientras que las verduras, la fruta, el agua o las legumbres suelen limpiar): vegetales, nueces, frutas, verduras; toma mucha agua; si tienes que comer carne hazlo sólo una o dos veces por semana; evita todo tipo de carne procesada (por ejemplo la pechuga de pavo o jamón dulce no es carne pura, es una masa procesada con el buen sabor que le dan los aditivos, la sal, los azúcares y los productos artificiales; además, procura consumir pescado pequeño y que no sea de piscifactorías.
- 2. Evita la comida procesada que tenga derivados del maíz, especialmente el aceite. De hecho, si revisas los ingredientes de todas las comidas procesadas, te sorprenderá comprobar que casi siempre contienen productos genéticamente manipulados de maíz.
- 3. En lugar de gluten, apuesta por la pasta de quinoa, pasta de arroz, arroz integral y harina de almendra, coco o centeno.
- 4. En lugar de leche de vaca o leche de soja puedes consumir leche de almendra, de arroz, de coco o yogur de cabra, oveja o kéfir.
- 5. En lugar de azúcar puedes tomar miel orgánica o algunos siropes naturales como el de ágave.
- 6. En lugar de cacahuetes es mejor consumir nueces o almendras.
Alimentos contra el exceso de hambre ¡frena tu apetito!
Si eres de las que no puede evitar resistirse a atacar la nevera porque te posee un apetito voraz a deshoras, la clave para retomar el control está en aumentar el consumo de alimentos saciantes, capaces de retrasar la sensación de hambre, incluso en situaciones de ansiedad o estrés.
Y es que, el tipo de alimento, la consistencia, la forma de cocinado o la densidad nutritiva influyen en la sensación repentina del hambre o, por el contrario, en el retraso del apetito.
Así, los alimentos ricos en fibra, carbohidratos complejos, proteínas y agua, se asocian de forma positiva con un mayor índice de saciedad, mientras que el contenido en grasa tiene un poder inferior de calmar el apetito.
¡A la rica fibra!
Ensaladas y verduras son tus aliadas para enriquecer tu dieta con vitaminas, minerales, agua y fibra. Si las consumes como entrante en tu menú, notarás cómo te saciarás con mayor rapidez y esa sensación se prolongará el tiempo suficiente como para evitar ataques de hambre repentinos.
No te olvides de la fruta, ideal para mantener el hambre a raya sin sumar grasas y calorías de más. Te recomendamos consumirla lavada y con piel fuera de las comidas principales, aunque si eres de las que llega a la mesa con un hambre voraz, nada mejor que tomar una pieza unos 30 minutos antes de comer, ¡verás qué cambio!
También puedes apostar por incluir algún complemento natural saciante como el glucomanano que, debido a su gran aporte de fibra es ideal para ayudarte a reducir grasa y evitar el picoteo incontrolado.
Proteínas
Si incluyes algo de proteína en cada comida principal, (también en el desayuno, no olvides que es la comida más importante del día y debe ser completa) te aprovecharás de su capacidad saciante. Incorpora un poco de queso fresco, jamón curado o fiambre de pechuga de pavo a la primera toma de alimentos de la jornada para conseguir mantener tu apetito bajo control varias horas y tus niveles de energía óptimos.
Además, no es preciso que carnes, pescados o huevos se sirvan siempre como plato principal de comidas y cenas, sino que se contemplen también como ingredientes de otros platos. ¿Qué tal una gran ensalada en la que incluyas atún, huevo cocido y unas virutas de jamón curado? Si añades un yogur de postre con 2-3 nueces, obtendrás una comida nutritiva pero ligera, rica en fibra, proteínas y con grasas saludables, ¡ideal para llevar al trabajo sin temor a desfallecer a media tarde! También puedes apostar por las siempre saludables ensaladas de legumbres.
Frutos secos, tus aliados
¿Te pica el gusanillo? ¿Ha llegado la hora del aperitivo y te sientes tentada a atacar las patatas fritas? Un puñado de frutas desecadas tales como ciruelas, pasas u orejones con unas avellanas, nueces o aún mejor, almendras, las cuales se ha demostrado pueden ayudarte a adelgazar, es un ejemplo de tentempié o aperitivo rico en fibra, proteínas y grasas sanas, que conseguirá saciar tu apetito y te ayudará a llegar a la siguiente comida sin rastro de hambre, prometido.
Adelgazar con Coenzima Q10
La Coenzima Q10 se ha convertido en uno de los suplementos nutricionales de moda. Diversos estudios aseguran que puede ayudar en la prevención de enfermedades como el cáncer, los ataques cardíacos y otras patologías relacionadas con el daño causado por los radicales libres. También se utiliza como potenciador general de la energía y suplemento antienvejecimiento pero, ¿sabías que también puede ayudarte a adelgazar?
La Revista Internacional de Medicina Complementaria publicó un estudio acerca de un seguimiento de 100 pacientes con obesidad mórbida, todos ellos siguiendo una dieta baja en calorías. Los niveles sanguíneos de la coenzima Q10 se encontraron bajos en más de la mitad de los participantes. A las personas con bajos niveles de coenzima Q10 se les suministró un suplemento diario de 100 mg, mientras que el resto de participantes no tomaron los suplementos nutricionales.
Después de dos meses, el grupo que tomaba el suplemento había perdido un promedio de 14 kilos, mientras que aquellos que no tomaban suplementos perdieron un promedio de 6 kilos.
Mientras que los investigadores subrayan que tomar coenzima Q10 no es una garantía de pérdida de peso, la deficiencia de la coenzima definitivamente podría tener un impacto negativo sobre los esfuerzos de la pérdida de peso. Y es que, la función principal de la coenzima Q10 es colaborar en la producción de energía a nivel celular, muy importante para conseguir adelgazar y mantener un peso corporal saludable.
Además, la coenzima Q10 ayuda a descomponer las grasas y otros nutrientes para convertirlos en energía que, entre otros, alimenta el sistema inmunológico y digestivo.
Se ha reconocido que la coenzima Q10 favorece el metabolismo, el aumento de energía, de resistencia y mejora la capacidad de quemar grasa corporal. También maximiza la capacidad del organismo para convertir los alimentos en combustible y ayuda a mantener en correcto equilibrio las grasas y los azúcares en la sangre.
Aunque el cuerpo produce naturalmente la coenzima Q10, su capacidad de producción disminuye con la edad, una de las razones de que la pérdida de peso sea generalmente más difícil a medida que envejecemos.
Alimentos ricos en coenzima Q10
Podemos evitar la deficiencia de coenzima Q10 con suplementos o consumiendo con regularidad alimentos que la contienen. El pescado, la carne (especialmente la de vaca), el hígado y otras vísceras como los riñones y el corazón son alimentos de origen animal ricos en coenzima Q10.
Algunos alimentos de origen vegetal también aportan coenzima Q10, entre ellos se destacan los cereales integrales, el germen de trigo, los aceites vegetales y derivados de la soja como el tofu, la leche de soja o la carne vegetal.
Fuente mujerdeelite.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario